Año 08 - Mes 06: Rider 1000 2016

Lo intentamos dos años pero no fue posible por lo que esta vez parecía que sería la definitiva….

Así que salimos juntas, mi amiga a trabajar y yo de viaje.

Tenia todo el días para acercarme a Cataluña y hacía un tiempo precioso, así que busqué carreteritas divertidas por la zona del País Vasco…

Y las fui mezclando con tramos mas rápidos y sencillos de Navarra…

Disfrutando de la primavera que parecía entrar con buen tiempo.

Antes de darme cuenta ya estaba en las inmediaciones del Montserrat…

Y me aproximé por una carreterita que no conocía…

Que me llevó directamente al pueblecito donde pasaríamos un par de días, Monistrol de Montserrat.

Al llegar me encontré con un montón de compañeras francesas que estaban de vacaciones y habían escogido el mismo hotel.

Como de costumbre, nos acercamos al día siguiente muy temprano para quitar de en medio las verificaciones y los trámites administrativos…

Tan temprano que aún no había casi nadie por el aparcamiento...

Y todavía estaban empezando a preparar los expositores.

Quedé aparcada en el aparcamiento mientras Santi hacía tiempo…

Sacándose fotos con el cartel oficial…

Repasando las instrucciones de la salida y el rutómetro…

Y fisgoneando las listas de los 2000 participantes…

Hasta que dio con su nombre… y el mío, claro.

Las inscripciones aún no estaban abiertas por lo que siguió mirando como montaban los diferentes puestos…

Y como descargaban a mis compañeras que iban a servir de prueba a los pilotos que lo quisieran.

Con algo de adelanto se abrieron las inscripciones cogiendo a Santi desprevenido y pasando del cuarto o quinto a estar bastante atrás en la cola…

Pero no fue nada preocupante porque había muchos puesto de verificación y la Organización estaba “bien organizada”.

Tras las verificaciones administrativas había que recoger la bosa con los regalos: una chaqueta cortavientos, un gorro, un brazalete reflectante y alguna cosilla mas que no recuerdo.

No obstante, Santi descubrió un puesto de venta de propaganda del evento y se compró…. Una gorra.

Pero bueno, el caso es que ya estábamos listos con la inscripción realizada y la pegatina de salida preparada.

Como ya había ambientillo a esa hora,…

Siguió con su fisgando entre las motos que había por allí…

De las que algunas llamaban poderosamente la atención.

Aunque se de sobra que a Santi le tiran las maxitrails grandes y enormes como yo…

O no tanto… no sé. Bueno, al menos es negra.

Aún quedaba mucho día por delante así que aprovechamos para ir a visitar unos cuantos monumentos, empezando por el monumento a Carlos Checa en San Fruitós de Bages...

Siguiendo por el monumento a Alex Crivillé en Seva…

Y acabando por el monumento a Toni Bou en Piera, tres fantásticos campeones.

Tras la visita cultural y dado que estábamos muy cerquita de Montserrat…

No quisimos desaprovechar la ocasión para acercarnos de nuevo a esa montaña mágica de difícil acceso…

E imposibles cumbres…

Por la que discurre una divertidísima carretera.

Después volvimos a acercarnos a Manresa…

Para ver por donde saldríamos al día siguiente…

Y hacer una foto con el letrero porque al día siguiente sería imposible.

Por cierto, foto realizada por algunos miembros de la organización que nos trataron muy bien.

El ambiente ya era otra cosa, con muchísimas compañeras por todos lados…

Haciéndose los últimos retoques para estar listas…

Y los puestos de las marcas exhibiendo a sus mejores representantes.

Las carpas estaban llenas de gente…

Y había corrillos por todos lados.

Yo me encontré con mi amarilla amiga Babieca y los pilotos se fueron un buen rato a charlar de sus cosas.

Cerca del anochecer hicimos una visita a las instalaciones del tren de cremallera que sube al Monserrat y dimos por finalizado el día, que mañana había que madrugar.

Tanto madrugamos que fuimos literalmente la primera moto en llegar al aparcamiento donde se daría la salida.

Teníamos tiempo de sobra y sabíamos por experiencia que poco a poco aquello se iría convirtiendo en un caos…

Así que repasamos nuevamente las instrucciones para el acceso a la salida que estaban perfectamente publicadas.

Teníamos que salir entre las 06:00 y las 06:15 aproximadamente, y a las 05:15 la salida ya lucia con todo su explendor.

Poco a poco y en grupos mas o menos grandes iban acercándose mas y mas compañeras…

Que iban aparcando según las instrucciones que daba la organización…

Para que los que teníamos que salir en las primeras plazas pudiésemos estar cerca de los pasillos y no hubiese embotellamientos.

Del aparcamiento general se accedía a dos grandes pasillos según la letra de la pegatina, y luego a otros cuatro según el color de la misma.

Todo funcionó perfectamente y enseguida estábamos a pocos metros de la primera verificación del día.

Por supuesto, no podían faltar las Vespas por allí, incombustibles compañeras que están en todos lados. Esta la vería durante muchos kilómetros antes del segundo punto de control.

Tras la primera comprobación de pasaporte, había una revisión de neumáticos y casco para estadísticas…

y luego la foto oficial de la Rider 1000.

Anda, mira, aun no salí y ya tengo el primer sello del día… esto está chupao.

Puf, cuanta gente aun por delante, no se yo a que hora saldremos.

Por cierto, esta compañera de 250 cc hizo la prueba el año pasado y Santi entabló conversación durante mucho rato con su piloto.

Poco a poco nos íbamos acercando a la línea de salida, a razón de 6 motos cada minuto.

Vamos, que a las 06:00 salieron puntualmente las 6 primeras compañeras, a las 06:01 las 6 siguientes y así sucesivamente hasta las 06:07 que hicimos esta foto y un minuto después, a las 06:08 tomaríamos la salida entre las motos 42 y 48.

Bueno, ya estábamos en marcha y los primeros kilómetros disfrutamos de una relativa tranquilidad hasta que empezaron a pasarnos grupos de compañeras, algunas tan nerviosas que nos encontramos un pequeño accidente en una curva en el kilómetro 50.

La carretera se transformó radicalmente en un pueblecito y pasó a ser una especie de pista forestal hormigonada…

Que nos llevó al primer punto de control con las primeras luces del día.

Quitados los nervios iniciales por el desconocimiento de la prueba, nos centramos en circular y disfrutar del paisaje y las nuevas carreteras.

Para acceder al segundo punto de control recorrimos una carretera realmente preciosa que grabé en mi centralita para repetir en otra ocasión, no obstante, había algo de atasco al llegar, pero nada preocupante.

Seguimos haciendo kilómetros y conseguimos evitar los nubarrones que había pronosticado el hombre del tiempo y que nos acechaban desde el sur.

Tercer punto de control, cuarto, … y llega un momento en que desaparecen el resto de compañeras y empezamos a rodar casi en solitario, aunque a poco que parásemos enseguida nos pasaba alguien en la misma dirección.

Los puntos de control estaban estratégicamente situados y permitían disfrutar de carreteras y paisaje…

Y hasta de alguna visita cultural para la que, obviamente, no había tiempo ese día.

Un poco más allá hice mi primer repostaje y Santi el suyo para posteriormente llegar al punto de control de Montgai donde se suponía que la mayoría de pilotos comerían.

Allí se juntaban participantes de la Rider 1000 con otros de la Rider 300 como esta espectacular Royal Enfield.

Por esta zona del norte de Cataluña me desenvolví bastante bien porque la mayoría de las carreteras eran conocidas…

Y eso me permitió rodar con un cierto grado de confianza.

El tiempo primaveral invitaba a rodar con tranquilidad y disfrutar del paisaje…

Sobre todo cuando recorrimos una zona que para mí era desconocida…

Y resultó ser todo un descubrimiento por su belleza y espectacularidad.

Así que rodé con mas tranquilidad…

Acordándome de los sitios por los que pasaba…

Mientras disfrutaba de preciosos paisajes…

Y bonitos pueblos medio perdidos en las montañas.

Tras el segundo y último repostaje nos acercamos al siguiente punto de control…

Y después de cruzar la Collada de Toses tomamos la divertidísima carretera que nos llevaba a Olot para el siguiente punto de control

Luego vendría el penúltimo control en el que muchas compañeras tomaron la autopista para acortar tiempo…

Y yo decidí seguir por el itinerario recomendado…

Con carreteras secundarias lentas y solitarias..

Pero divertidísimas.

Y así llegamos a Talamanca donde nos pusieron el último sello y nos dijeron que éramos la moto número 60 en llegar allí.

De Talamanca a Manresa solo había unas decenas de kilómetros y llegamos en un pis-pas…

A eso de las 20:30 tras 952 kilómetros muy entretenidos.

Mira, una foto en la llegada cortesía de un miembro de la organización.

Después quedé aparcada…

Mientras Santi iba a recoger los últimos regalos tras entregar el pasaporte con todos los sellos cubiertos.

Y aquí los tienes, cuatro pegatinas mas un pin grandote a los que les sacó una foto mientras cenaba un buen plato de alubias.

Cada vez había mas ambiente en la cara oficial…

Y en la zona de llegada…

Donde ganaban por goleada los brazaletes naranjas de las compañeras de la Rider 500.

A medida que avanzaba la noche iban llegando mas y mas motos…

Baja la atenta mirada y control de los miembros del Moto Club Manresa.

Venía con ideas preconcebidas nada positivas sobre este evento y la verdad es que estaba totalmente equivocada.

Siempre dije que no hay nada como opinar en primera persona y me pareció una prueba muy bien organizada y que con una buena relación entre el precio y lo que dan.

Así que, ya bien entrada la noche…

Y con muy buen sabor de boca, fui abandonando el aparcamiento…

Y Manresa para acercarme a descansar al hotel.

No suelo desplazarme tan lejos sin llevar unos días para disfrutar del entorno así que al día siguiente seguimos de ruta bajo una incesante lluvia…

Que no nos abandonó hasta llegar a Cardona…

Donde paramos a visitar su impresionante Parador Nacional…

Que bien pudiera ser uno de los castillos mas bonitos de Cataluña…

Y desde el que hay unas vistas impresionantes de la zona.

Seguimos rumbo norte y pantano de El Cardener.

La carretera pasa sobre el muro de la presa y está encajonada entre dos túneles…

Dando un aspecto robusto al conjunto.

La idea era visitar los mismos puertos que me llamaron la atención ayer pero subiendo desde otra zona pero… a medida que ganaba altura la lluvia se volvía intensa y la niebla no dejaba ver nada.

En fin, no es la primera vez que tengo que tomar esta decisión así que decidí quedarme por zonas mas bajas…

Que al menos me dejaban disfrutar de parte del paisaje.

Y como había tiempo de sobra, incluso nos permitimos dar un pequeño rodeo…

Para que Santi repostase mientras se entretenía viendo las carreras de mis compañeras de Moto GP.

Después continuamos disfrutando del día…

Y de los pocos paisajes que nos dejaba ver la niebla.

Bueno, estamos en primavera, así que las lluvias son normales.

Enseguida llegamos al siguiente destino que aparecía semioculto por la niebla…

Pero que siempre impresiona…

A pesar de que no se pudiese ver en todo su esplendor.

En el hotel de Andorra me encontré con una compañera de marca que viaja con todo tipo de lujos y me preparé a descansar mientras que Santi se iba de excursión por la ciudad.

El día siguiente amaneció lloviendo como bien pude comprobar con esta compañera que permaneció toda la noche mojándose.

En fin, los pronósticos dan lluvia para esta zona durante los próximos días…

Así que no merece la pena quedarme por aquí, para no disfrutar del paisaje mejor me vuelvo a Asturias que también llueve mucho.

Eso si, me voy con un muy buen sabor de boca de esta prueba en la que había intentado participar dos veces pero que, por fin, pude experimentar de primera mano.














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1 comentario:

  1. Muy buena crónica. Espero poder hacer esta prueba en el 2017. gracias por compartirla.

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