Año 06 - Mes 02: Enero 2014

Comencé Enero con una excursión a tierras cántabras en busca de unos amigos de Santi…

Que llegaron a medio bocadillo, vamos, que los pillaron con el bocado en la boca.

Los amigos en cuestión son los Moreno Bikers, del País Vasco, que vienen cada principio de año a Potes de excursión.

Quedamos aparcadas fuera y nuestros pilotos pasaron a saludar y charlar un ratito.

Un viernes me acerqué dando un paseo al mirador del puerto Pajares, 

Pero no un viernes cualquiera sino el viernes de la concentración de Pingüinos por lo que se veía mucho movimiento de motos.

Aprovechando el buen tiempo, otros vehículos también disfrutan de la carretera como este precioso camión clásico perfectamente restaurado.

Y aprovechando el buen tiempo, El Roxu llamó a Santi y no encaminamos a Pingüinos nosotras también, formando parte de una oleada de motos entre las ue nunca faltan las incombustibles Vespas…

Y los raros y exóticos sidecars, nada habituales en nuestra Península.

Con un tiempo soleado, era lógico que se batiese el record de asistencia.

Por supuesto, una foto conmemorativa del evento…

Y a partir de ahí a ver cosas raras y curiosas, como esta protección contra las inclemencias del tiempo, un poco exagerada para mi gusto…

O esta prima de marca a la que sus dueños transformaron en “algo” indescriptible.

También abundan las soluciones ingeniosas para problemas comunes.

Las nuevas generaciones vienen con ganas…

Y no es de extrañar viendo como se alimentan los pilotos en estas concentraciones.

Por cierto, algunas de mis compañeras lucen orgullosas su increíble trayectoria Pingüinera.

Porque hay que ver lo bien que se lo pasan los pilotos en estos eventos.

Mira aquí a Santi haciendo la típica foto en el Iglú.

Pero a mi siguen sin gustarme las concentraciones, en este momento Santi me sacó una foto mientras El Roxu y Fernando se impacientaban para ir a pasear toda la tarde por el recinto mientras nosotras desperdiciábamos una bonita tarde soleada de sábado descansando sobre nuestros caballetes.

Eso si, da gusto ver la cara de felicidad que ponen los pilotos cuando se encuentran con amigos a los que hace tiempo que no ven.

Aquí con Raúl Calvo, uno de los dos primeros españoles en llevar a Cabo Norte en invierno…. ¡¡¡se dice pronto!!!  www.nordkappextrem.com. El otro es Tino, que, como no quiere la cosa, es uno de los poquísimos pilotos que estuvo en Pingüinos 1, si, si, la primera edición de Pingüinos.

Y aquí con Gustavo Cuervo, uno de los primeros viajeros moteros de España.

Como puedes ver, los grandes veteranos de estas historias se conocen desde hace mucho, mucho tiempo. Mira lo efusivamente que Gustavo saluda a El Roxu… yes que se conocen desde hace muchos años.

En esta otra nada menos que tres MOTEROS con mayúsculas, cientos de miles de kilómetros e infinidad de aventuras y experiencias juntas.

Porque aquí se puede hablar de viajes y destinos lejanos…

Aunque Santi siempre encuentra alguna actividad alternativa de esas que también le encantan…

Sino mira la cara que pone en esta foto: “¡Quiero seguir cogiendo al perrito!”,

Ya al anochecer emprendimos el camino de regreso a casa…

Donde los pilotos aprovechan para hacer tertulias y charlas, como si no hubiesen tenido suficiente.

Increíblemente vino un clima muy benévolo lo que me permitió disfrutar de unas cuantas salidas mas por los alrededores disfrutando de la naturaleza.. 

Y observando como los humanos aprovechan sus recursos con mayor o menor impacto.

Pero los días son muy cortos y las noches caen muy pronto.

Por eso aprovecho cada ratito de que dispone Santi para dar un paseo…

Aunque sea por las mismas carreteras de siempre…

Como este tramo abandonado que discurre paralelo a la Senda del Oso en Proaza (Asturias).

Un paso estrecho entre paredes de piedra…

Con un río de aguas cristalinas en el fondo.

Por si fueses poco, este mes me publicaron otra crónica los amigos de LA MOTO, en este caso la correspondiente al Objetivo 300.000 que puedes ver aqui: Objetivo 300.000

Pero a final de mes Santi me prometió una escapadita de fin de semana…

Y sin darme cuenta, me encontraba en un pueblecito que no conocía, Almazán.

Fotos y mas fotos en su casco antiguo, algunas en las que salgo yo a duras penas…

Otras que muestran un curioso mirador sobre el río Duero…

Y otras que muestran la zona mas monumental del pueblo.

Pero yo quería rodar, así que nos pusimos en marcha… para parar a solo 40 kilómetros y empezar otra visita turística.

En esta típica y tópica foto Santi me hizo prometer que no diría que se puso sobre el bordillo para parecer masl alto, asi que no lo digo.

A que esta foto es mas guapa que la anterior, eh.

¿Y eso de ahí abajo…?

Vamos a verlo, faltaría mas. El Cristo de Medinaceli.

Por fin en marcha otra vez… y de nuevo nos pareamos en el pueblo de Rillo de Gallo a ver esta curiosa casa con claras referencias a Gaudí.

Ya la había visto en otras ocasiones pero entramos al pueblo y preguntamos. Parece ser que es de un constructor que la hizo a modo particular aunque aun tiene el interior sin acabar.

A pocos kilómetros volvimos a detenernos en Molina de Aragón para hacer algunas fotos.

Dentro había este curioso y antiguo puente por el que aun permiten transitar vehículos.

Pero lo mas representativo es su castillo, así que preguntamos y tomamos una pista a las afueras…

Que nos llevó a la parte alta del pueblo donde está el castillo…

Y desde donde hay una bonitas vistas de esta zona fría y árida en invierno.

Por fin conseguí que Santi se dejase de tanto turismo y rodamos un buen rato hasta nuestro destino del día, el pueblo de Manzanera y su camping donde se celebraba la XXV Estrella de Javalambre.

Como era temprano decidí dar un paseo y me encontré con mi amiga Derbi Terra 125 y su gran piloto Joaking. Nos pusimos de acuerdo y continuamos la tarde juntas.

Como estábamos cerca, nos acercamos a Aras de los Olmos donde hice un curso el mes pasado.

Después de los típicos saludos entre humanos, nos acercamos a la zona de entrenamientos a la que nos permitieron acceder libremente.

Allí mi amiga dio sus primeros pasos en tierra…

Y yo no me contuve, entré a disfrutar como una Maxi Trail.

Pero disfrutamos poco tiempo porque había que hacer las inscripciones y todo eso, así que cogimos la bonita carretera que nos separaba de Manzanera…

Y volvimos al camping donde nos encontramos con esta amiga Teneré que vino de Finlandia nada menos.

También había una buena representación de motos clásicas, aquí unas preciosas Montesas.

Pero la verdadera protagonista de la concentración fue Beltza, una de las dos primeras motos españolas en llegar a Cabo Norte en pleno invierno. www.nordkappextreme.com

Durante la tarde hubo una entretenida presentación de esta aventura a cargo de Raul Calvo.

Y ya al día siguiente… mi momento, ¡a rodar!.

Es mi segunda Estrella de Javalambre así que subí del tirón para llegar tranquilamente.

Poco después llegó mi amiga Terra 125…

Y su piloto que se encontraba orgulloso de haber conseguido su primera Estrella de Javalambre, aunque yo nunca dudé de que lo iba a conseguir sin problemas.

Aquí quedó inmortalizado el momento. Aquí tienes la crónica que hizo Joakíng de su aventura: XXV Estrella de Javalambre

Esta es la peor parte de la concentración para mi, Santi se dedica a relacionarse con otros pilotos amigos o nuevos amigos…

Incluso se hace fotos con el organizador del evento, Pedro Flores.

Y es que es la hora de la charla y las aventurillas mientras nosotras nos aburrimos sobre el caballete.

Eso si, yo se donde descansar, mira que amiga mas guapa me encontré.

Por fin a Santi le entraron las ganas de rodar y seguimos la pista hacia arriba en busca de un observatorio astronómico, aunque un tramo de nieve nos hizo desistir. Santi se está haciendo mayor y responsable.

Comenzamos la bajada haciendo fotos de las vistas desde la pista embarrada…

Cuando me encuentro con Beltza y Raúl a su manillar que se dirigían al observatorio.

Sin dudarlo, di media vuelta y me dispuse a acompañarla puesto que con una compañía como esta, una va tranquila al fin del mundo… o a un observatorio astronómico.

Mientras los pilotos preparaban el trípode para la foto de turno apareció mi preparadísima compañera GS 1200 Adv con su piloto Juan Oso y así, entre estas dos auténticas campeonas y sus dos pilotos experimentadísimos, me hice una foto con Santi a mi lado.

GS 1200 Adv y Juan se fueron pronto y nosotras lo hicimos un poco después mientras yo llevaba en mi retrovisor a Beltza. ¡No todos los días se rueda con una campeona cubriéndote el guardabarros trasero!.

Por supuesto, Santi no pudo evitar las típicas paradas para las fotos…

Y la verdad es que los paisajes semidesérticos y con abundante nieve lo merecían.

Aprovechamos para conocer el sitio habitual de entrega de las medallas al que no se llega desde hace algunos años por culpa de la nieve y el barro.

De ahí ya emprendí el descenso hacia el pueblo parando a deleitarme con los inmensos bosques…

Y recordando el lugar de entrega de hace dos años cuando subí por primera vez a por la Estrella de Javalambre.

Poco mas abajo me encontré con mi nueva amiga Terra 125 Adventure con su grandísima piloto Chusa, que también vino del norte rodando, también subió a por su estrella y también consiguió alcanzar su sueño (un saludo para Chusa).

Luego vino un rato de aburrimiento para nosotras que descansamos mientras nuestros pilotos comen y se cuentan sus batallitas y conocen a otros grandes moteros venidos de todas partes de la península (un saludo para Pedro)…

Y se hacen homenajes a quien trabaja duro porque esto siga adelante (un saludo para Peter).



Como la tarde aún daba para mucho, nos acercamos al puerto de Escandón, que no tiene mucho  aliciente motero pero a Santi le gustan los trenes…

Y le hacía gracia hacerme una foto llena de arcilla en un cargadero de arcilla, ya ves.

De ahí, y a muy pocos kilómetros, nos fuimos a Teruel donde “turisteamos” un ratito…

Haciéndonos fotos aquí y allí en una tarde donde apenas había gente en la ciudad.

Santi me llevó a una céntrica plaza donde había estado hace muchos años pero no había conseguido ver a “el Torico”, esta vez si estaba pero yo tuve que verlo de lejos.

Salimos del centro por una de sus estrechas calles pasando por debajo de una de sus famosas torres…

Y nos dirigimos a rodar de nuevo, aunque enseguida hicimos otra parada, en esta ocasión en la Vía Verde de Ojos Negros.

Se trata de una antigua vía de ferrocarril abandonada y aprovechada para senderistas y ciclistas que recorre estos paisajes ocres y marrones…

Atravesando las montañas por infinidad de túneles…

Y preciosos puentes…

Donde Santi no se resiste a ser protagonista de la foto…

¿No te parece que es mucho mas guapa la foto así?, humanos…

Como aun quedaba bastante rato de sol subimos a conocer la estación de esquí de Javalambre que es pequeñita pero tenía mucho ambiente un domingo por la tarde.

A la vuelta me empeñé en hacerme una foto con un par de puentes del ferrocarril por lo que me metí por una carreterita muy pequeña y estrecha…
- ¡Huy!, ¿me dejas pasar?.
- NO

- Bueno, vale, al menos dime como puedo acercarme a esos puentes.
- Toma ese camino de la derecha y sigue recto, no tiene pérdida pero no se si conseguirás pasar.

Era un poco borde y "casi tiene razón", pero yo soy muy cabezona y conseguí pasar…

Y sacarme la foto con los preciosos puentes, uno del ferrocarril actual y otro del antiguo ferrocarril que actualmente está reconvertido en vía verde.

Es mas, me saqué esta otra foto porque yo lo valgo.

Ese día no dio para mas pero el siguiente amaneció totalmente despejado y nos dirigimos a un sitio que Santi tenía ganas de conocer.

Encontramos unas preciosas carreteras solitarias y bien asfaltadas entre verdes bosques…

De hecho, estábamos en un parque natural como es lógico.

Paseamos con tranquilidad, teníamos tiempo, buen clima y carreteras solitarias, así que a disfrutar del paisaje.

Y por fin llegamos a mi cuarto lazo o nudo de corbata de España, el que se encuentra en Castellón entre los pueblos de Aín y Eslida.

Es simpático ver como se retuerce la carretera en el GPS.

Y es espectacular la vista de la carreteras desde un poco antes.

Hay que reconocer que los ingenieros se esmeran en hacer estas curiosas carreteras.

Después de un rato seguimos camino por bonitos y solitarios puertos…

Hasta llegar a la zona baja donde Santi me enseñó el curioso “calvario” de Sot de Ferrer. Por supuesto, yo no pude hacerlo pero el si lo hico hace muchos años en bici de montaña.

Ahora empieza el tiempo de turismo, comenzando por Sagunto…

Donde subimos hasta su castillo que, desgraciadamente, está cerrado los lunes.

De ahí fuimos hasta Castellón pero era tal el tráfico, las direcciones prohibidas, las calles peatonales y la presencia de policía local que enseguida decidimos irnos. Aún así me hice una foto con esta curiosa estatua medio rota que salió en los telediarios hace algún tiempo.

Por suerte volvimos a las carreteritas solitarias lejos de los semáforos y las direcciones prohibidas, solo carretera y carretera.

Impresionantes vistas en cuanto asciendo un poco, bosques inmensos de árboles de hoja perenne, disfrute total... aunque me daba la sensación de que mi rueda trasera no agarraba del todo bien, incluso puse un poco de aire en una gasolinera.

Algunas carreteras denotaban el paso de las últimas lluvias, lo cual daba un pequeño toque de alegría a la circulación.

Y me encontré con zonas muy fotogénicas…

Como este impresionante cañón formado por el río.

Aunque estaba disfrutando, tocaba ir acercándose al hotel porque las tardes no dan para mucho en enero…

Pero aun me quedaba tiempo para visitar Segorbe donde descubrí la Calle Almas / Calle Pastora con un curiosísimo y retorcido trazado en zig-zag. Tengo que repetir, es un sitio curioso de verdad.

Al día siguiente tocaba regresar a Asturias y Santi me prometió que no habría paradas para hacer turismo, solo rodar y rodar.

Bueno, vale… los planes no siempre salen como una desea.

Pero si que nos hicimos el trayecto casi sin incidentes en su totalidad, salgo mucha lluvia, algo de nieve y muchísimo viento entre Cuenca y Valladolid, nada fuera de lo habitual en estas épocas.

Curiosamente, al acercarnos a la meseta el tiempo mejoró aunque la nieve estaba cerquita.

Y ya al coronar Pajares me despedí del sol para entrar en las constantes nubes de Asturias.

Por cierto, yo tenía razón, mi rueda trasera tenía un tornillo clavado y por eso perdía aire. Una mecha y a seguir rodando.








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